Sacerdote franciscano fue director e impulsor del Apostolado Franciscano de Caballeros de San Judas Tadeo.
El pasado 14 de enero, la Provincia Franciscana de los XII Apóstoles del Perú recordó el 119° aniversario del nacimiento de Fr. José María Garmendia Castañeda OFM, sacerdote franciscano nacido en el Cusco el 14 de enero de 1905 y fallecido en Lima en 1984.
Tal como consta en la Necrología de la Provincia su vestición fue en 1922 en San Francisco de Lima. Ordenado Sacerdote, los superiores lo destinaron como Familia a las diversas casas de la Provincia. Desempeñó los cargos de subdirector del Colegio San Francisco de Arequipa, Guardián de los Conventos de San Antonio de Puno, y San Francisco de Lima; Definidor y Vicario Provincial; Director del Apostolado Franciscano de Caballeros San Judas Tadeo, por muchos años. Asimismo, fue iniciador y propulsor de las obras de construcción del Templo San Antonio de Puno. Murió en Lima el año 1984.
Entre sus obras más recordadas está su trabajo como asistente espiritual y animador del Apostolado Franciscano de Caballeros de San Judas Tadeo, fundado por el P. Orestes Alegre Vásquez OFM en 1940.
Es importante señalar que el 28 de septiembre de 1941 se fundó en Lima el Apostolado Franciscano de Caballeros de San Judas Tadeo, con sede en la Basílica Menor de San Francisco. El año 1975 la reliquia sagrada de San Judas Tadeo (uno de sus dedos), fue traída desde Tolosa por el asesor de Apostolado Rvdo. Padre Fr. José María Garmendia Castañeda OFM.
Desde esa fecha se fundaron hermandades en varios distritos, como en la Parroquia de Santa Ana en Barrios Altos, Mirones Bajo, Villa El Salvador, el templo Faro (Callao), Santa Catalina, San Miguel y Barranco.
TESTIMONIO SOBRE EL P. JOSÉ GARMENDIA
En una entrevista al Hno. José Alberto Mauricio Sánchez, secretario vocal de Culto del Apostolado Franciscano de Caballeros de San Judas Tadeo, señala que ingresó al apostolado en el año 2001 y aunque no conoció personalmente al P. Garmendia, ha escuchado testimonios de hermanos mayores.
“Los hermanos mayores siempre nos han informado y dado su testimonio sobre el P. Orestes Alegre y especialmente sobre el P. Garmendia, porque nos dejaron muchas enseñanzas. Ellos me decían que el P. Garmendia siempre ponía énfasis en que los Caballeros de San Judas Tadeo tenemos que ser militantes de Cristo, cuidar y difundir la fe católica”.
Y añade: “El P. Garmendia se caracterizaba por ser muy estricto y constante respecto al trabajo pastoral, pero a la vez un sacerdote muy exquisito en cuanto a sus sermones, incluso se conservan sus escritos. Esa mística se transmite en las nuevas generaciones y por eso es que se ha extendido la devoción a San Judas Tadeo. Miles de personas vienen los días 28 de cada mes y hacen cola para llegar al altar y suplicar, incluso llorando, y Dios les concede muchos milagros por intercesión de ´El Viejo´, que así le decimos cariñosamente a San Judas”.
Precisó que el Apostolado Franciscano de Caballeros de San Judas Tadeo tiene actualmente la asesoría espiritual de Fr. Rodolfo Ibañez Neyra OFM y Fr. Ernesto Chambi Cruz OFM.
“El P. Garmendia nos ha dejado un gran ejemplo de vida, nos han dado un gran mensaje: todos los miembros del Apostolado Franciscano de Caballeros de San Judas Tadeo tenemos una misión: defender la fe cristiana con humildad y con el acompañamiento de María Santísima y de San Francisco de Asís, para forjar verdaderas familias católicas. Tenemos que cumplir con la labor de la evangelización, difundir valores, a pesar de que se viven tiempos de apostasía. Hay que estar siempre preparados, mediante la fe, la oración y la lectura de la Biblia”, señala.
Comentó que, en tiempos de pandemia, a pesar del dolor y sus consecuencias nefastas, también “Dios ha permitido fortalecer la fe y la difusión de la palabra de Dios mediante la comunicación virtual, los medios electrónicos, las redes sociales e Internet”.
El Hno. José Alberto Mauricio Sánchez citó “Historia de San Judas Tadeo” (1995), de Guillermo Morales Lazo, que contiene interesantes datos sobre el Apostolado Franciscano de Caballeros de San Judas Tadeo, así como sobre las reliquias que se conservan en la Basílica de San Francisco de Lima y además un importante escrito del P. José Garmendia, titulado “El culto a San Judas Tadeo”
RELIQUIAS DE SAN JUDAS TADEO
El Perú es uno de los pocos países en el mundo que tiene el privilegio de poseer sagradas partículas de los huesos del Apóstol de Cristo, San Judas Tadeo, las mismas que se veneran en Lima, Callao y Chimbote
En Lima, se conservan en la Cuatricentenaria Iglesia de San Francisco (1546), elevada a la categoría de Basílica en el 11 de Enero de 1963 y considerada como arca llena de primorosos tesoros del Arte Colonial Peruano.
Su Santidad, el Papa Pablo VI autorizó el traslado de las reliquias a la capital peruana, habiendo llegado éstas, el 20 de Setiembre de 1964, ante las gestiones personales del Rev. Padre José María Garmendia de la Orden Franciscana Menor
Es correcto referir que, muchos años atrás, un 15 de junio de 1915, habían llegado al Callao, primer puerto de la República, las reliquias de San Simón y San Judas, con la” auténtica” de veracidad, concedida por su Santidad el Papa Benedicto XV, cumpliéndose así, un anhelo de sus devotos chalacos.
La Iglesia celebra la festividad de San Judas Tadeo el 28 de octubre, saliendo en procesión central el primer domingo de noviembre. Los días 28 de cada mes, a las 7:00 pm y todos los domingos a las 11 am, en la Basílica Menor de San Francisco de Jesús de Lima, se realiza la misa en honor al Santo Patrón. Al término de la misa del 28 sale en procesión la reliquia sangrada de San Judas Tadeo.
Por Fr. Abel Pacheco Sánchez OFM
Prensa Franciscana del Perú