El 19 de abril de 2025 se conmemoraron los 300 años de fundación del histórico Convento de Santa Rosa de Ocopa, claustro religioso de la orden franciscana que representa un emblema de identidad para la región Junín y el Perú. ¿Cuál es la historia y trascendencia de este centro de formación sacerdotal y misionera, convertido en ineludible atractivo turístico?, ¿Qué pueden apreciar los visitantes en sus cautivantes ambientes?, ¿Cuál es el libro más antiguo que atesora su formidable biblioteca?
Por Agencia de Noticias Andina.-
Historia del Convento de Santa Rosa de Ocopa
El Convento de Santa Rosa de Ocopa se ubica al noreste de la ciudad de Concepción, capital de la provincia del mismo nombre, a 28 kilómetros al norte de la ciudad de Huancayo. Contiguo al convento se encuentra la Iglesia Matriz de Santa Rosa de Ocopa, templo protagonista de importantes celebraciones religiosas en la región Junín y lleva el nombre de la primera santa peruana y de América. Este claustro religioso está rodeado de una frondosa arboleda de alisos, quishuares, alcanfores y límpidos manantiales.

Su construcción fue dispuesta por el fraile seráfico Francisco de San José, en 1725, como convento misionero para evangelizar a las comunidades indígenas de la selva central peruana.

Este antiguo convento, conocido como el “Claustro de la Obrería”, luce hoy, gracias a la restauración hecha por la arquitecta concepcionina Vivian Orozco, tal y como lo hizo edificar su fundador, de quien figura una estatua en el patio central, obra del maestro Catalino Martínez y colocada en 1970.

Este convento se establece en 1755 como Colegio de Misioneros Apostólicos Franciscanos y en 1758 obtuvo el rango “De Propaganda FIDE” (Congregación para la Evangelización de los Pueblos, nacida en 1622, cuya tarea fue la propagación de la fe y la difusión del Evangelio en el mundo). Durante la guerra por la independencia, sus instalaciones se usaron como hospital militar.

¿Qué pueden apreciar los visitantes en el convento?
Para ingresar al Convento se accede a través de un pequeño claustro denominado “Despacho parroquial”, de puro estilo arquitectónico mozárabe, construido en 1965, cuando era dirigido por el sacerdote Roque Irazábal, quien contó con el apoyo del entonces senador Ramiro Prialé.

Un nuevo convento, austero, pero al mismo tiempo alegre y acogedor, recibe a los visitantes con el claustro denominado “De la Portería”, el más antiguo terminado de construir a inicios del siglo XIX en tiempo del sacerdote Pedro Gonzáles de Agüeros. Consta de tres pisos y conserva en sus paredes valiosas pinturas de la emblemática Escuela Cusqueña, así como escenas talladas en piedra de Huamanga que representan la Pasión de Cristo.

Otro ambiente destacado es el “Claustro del Olivo”, llamado así porque mantiene en su patio un retoño del olivo plantado por el fundador del convento hace tres siglos. En sus corredores se exhibe una extensa colección de 30 cuadros de la escuela cusqueña sobre la vida de San Francisco de Asís que fueron mandados pintar para Ocopa durante la guardianía del sacerdote Manuel Becerril, entre 1761 y 1763. La construcción de este claustro se inició por el año 1915, siendo superior el sacerdote Policarpo Bengoechea y decorado en 1921 por el maestro Catalino Martínez, quien construyó la pileta central.

El último ambiente visitable es el “Claustro del Padre Pío Sarobe”, el más reciente, pues fue inaugurado en 1959, quedando exactamente detrás de la iglesia. Es llamada así porque en el centro del patio se encuentra la estatua del venerable Padre Pío Sarobe (1855-1910), morador y guardián del Convento de Ocopa, quien fue un virtuoso religioso y murió con fama de santo en la ciudad de Huancayo.
Fuente: Agencia de Noticias Andina, en https://andina.pe/agencia/noticia-convento-santa-rosa-ocopa-%C2%BFpor-trasciende-este-claustro-religioso-300-anos-1025688.aspx
PRENSA FRANCISCANA con información y fotos de ANDINA.