Los días 28 de cada mes, cientos de fieles llegan hasta la Iglesia de San Francisco de Lima para cumplir puntualmente una promesa: orar a San Judas Tadeo, más conocido como «patrono del trabajo y de las causas imposibles».
Desde antes de las 6 de la mañana se aprecia una enorme fila de personas en la intersección de la Av. Abancay y el Jr. Äncash. Junto a ellos, vendedores de flores multicolores ofrecen ramos a los devotos, que hacen cola para llegar el templo franciscano y acercarse a la imagen que se ubica en un altar de la Iglesia de San Francisco.
En la Basílica Menor de San Francisco de Lima funciona el “Apostolado Franciscano de Caballeros de San Judas Tadeo”, fundado el 28 de setiembre de 1941 por el Rvdo. Padre Orestes Alegre Vásquez OFM. Uno de sus asesores espirituales fue Fr. José Garmendia Castañeda OFM, quien el año 1975 trajo una reliquia sagrada de San Judas Tadeo, desde Tolosa.
Como se sabe, San Judas Tadeo fue uno de los doce apóstoles de Jesucristo. En el los sagrados evangelios de Mateo y Marcos se le llama simplemente Tadeo, mientras que en el Evangelio de Lucas y en los Hechos de los Apóstoles se le llama Judas de Santiago. A veces se le identifica con Judas, el hermano de Jesús. Generalmente se acompaña el nombre de «Judas» con algún adjetivo, para diferenciarlo de Judas Iscariote, el apóstol que traicionó a Jesús.
La Iglesia celebra la festividad de San Judas Tadeo el 28 de octubre, saliendo en procesión central el primer domingo de noviembre. Los días 28 de cada mes, a las 7:00 p.m. y todos los domingos a las 11 a.m. en la Basílica Menor de San Francisco de Jesús de Lima se realiza la misa en honor al Santo Patrón. Al término de la misa del 28 sale en procesión la reliquia sagrada de San Judas Tadeo.
DEVOTOS DE CORAZÓN
Los devotos vienen desde todos los distritos de Lima hasta la Iglesia de San Francisco. Algunos vienen desde el extranjero. ¿Qué los motiva? Todos coinciden en que «San Judas Tadeo es un santo muy milagroso» y cuentan que su devoción se la inculcaron sus padres, quienes también tenían costumbre de venir a la Iglesia y rezarle. La mayoría señala que obtuvieron trabajo y otros aseguran haberse curado de enfermedades.
Por tradición, los fieles llevan flores hasta el altar de San Judas Tadeo. Aunque el término del día se acumulan decenas de ramos, por esa razón los sacerdotes franciscanos recomiendan a los devotos donar ropa o víveres no perecibles para el Comedor San Antonio de Padua.
Este año, debido a las restricciones por medidas de seguridad dadas por el gobierno ante las protestas violentas en el centro de Lima, los fieles tuvieron que retirarse antes de las 4 de la tarde. Otros años, se quedan hasta la noche.
RELIQUIAS DE SAN JUDAS TADEO
El Perú es uno de los pocos países en el mundo que tiene el privilegio de poseer sagradas partículas de los huesos del Apóstol de Cristo, San Judas Tadeo, las mismas que se veneran en Lima, Callao y Chimbote
En Lima, se conservan en la Cuatricentenaria Iglesia de San Francisco (1546), elevada a la categoría de Basílica en el 11 de Enero de 1963 y considerada como arca llena de primorosos tesoros del Arte Colonial Peruano.
Su Santidad, el Papa Pablo VI autorizó el traslado de las reliquias a la capital peruana, habiendo llegado éstas, el 20 de Setiembre de 1964, ante las gestiones personales del Rev. Padre José María Garmendia de la Orden de los Frailes Menores.
El 15 de junio de 1915 llegaron al Callao, primer puerto de la República, las reliquias de San Simón y San Judas, con la” auténtica” de veracidad, concedida por su Santidad el Papa Benedicto XV, cumpliéndose así, un anhelo de sus devotos chalacos.
Prensa Franciscana del Perú / Lic. Nivardo Vasni Córdova Salinas
